La llegada del mes de noviembre marca la reducción de las concentraciones de polvo del Sahara que alcanzan territorio dominicano, coincidiendo con la conclusión de la temporada ciclónica, de acuerdo con lo informado por el expertos del Instituto Dominicano de Meteorología (Indomet).“A medida que llega el mes de noviembre, comienzan a reducirse las concentraciones de polvo en nuestra área; es algo que siempre ha ocurrido durante este período”, indicó Wagner Rivera, del área de Pronóstico de la entidad.Agregó que, en estos meses, la presencia de las concentraciones de polvo fluctúa.El polvo sahariano consiste en una masa de aire seco y caliente cargada con partículas de arena que, como su nombre indica, se origina en el desierto del Sahara. Los vientos permiten que estas concentraciones viajen miles de kilómetros hasta llegar al Caribe. RELACIONADAS Clima Pronostican temperaturas calurosas, polvo del Sahara y lluvias este martes Inhibidor de ciclonesLos expertos han explicado cómo el polvo de Sahara influye en la inhibición de tormentas por sus “únicas” propiedades. “El polvo del Sahara, por regla general, disminuye la actividad ciclónica porque es un aire muy seco, entonces no da posibilidad de formación de sistemas tropicales”, detalló Gladys Rubio, meteoróloga del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Rubio ofreció la explicación a finales de mayo, cuando la agencia estadounidense informó sobre la llegada del polvo sahariano a Florida y su impacto en la actividad ciclónica de esa área. RELACIONADAS Clima Pronostican calor, polvo del Sahara y lluvias en varias localidades dominicanas este miércoles Impacto calidad de aireDatos del Ministerio de Medio Ambiente señalan que, entre mayo, junio y julio —meses en los que el polvo del Sahara tuvo mayor incidencia—, se registró un incremento en las concentraciones de material particulado, un indicador de contaminación atmosférica, lo que contribuyó a la disminución de la calidad del aire en varias zonas.Los registros añaden que, en algunos períodos de incidencia del polvo, la cantidad de estos particulados sobrepasó los valores máximos establecidos para contaminantes presentes en el aire.Un informe de la Dirección de Calidad Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente indica que la incidencia del polvo sahariano “afecta la calidad del aire que respiramos debido al incremento de la concentración de partículas finas, como lo son las partículas de diámetro aerodinámico igual o menor a 10 micrómetros (PM-10) e igual o menor a 2.5 micrómetros (PM-2.5)”.De acuerdo con el Reglamento Técnico Ambiental de Calidad del Aire del ministerio, la PM-10 tiene su origen en el polvo, las cenizas, el hollín, el cemento, el polen o las partículas metálicas, mientras que la PM-2.5 proviene principalmente de fuentes de combustión. Por su facilidad para penetrar directamente en el torrente sanguíneo, este último se considera un contaminante peligroso.Las autoridades señalan que, como medida para resguardar la salud de las personas, el Reglamento Técnico Ambiental de Calidad del Aire del ministerio establece valores máximos permitidos para los contaminantes criterio (los más conocidos y regulados, como el monóxido de carbono o el plomo) y los considerados no convencionales (como el mercurio o el benceno).